Regreso a clases 2020 lleno de angustia e incertidumbre

de Ian Howarth | Autor, consultor de SchoolAdvice | GME@dhr-rgv.com

Ian Howard

Sphector of COVID-19 proyecta una gran sombra en el nuevo año escolar

Como maestra de primer año en 1975, tuve más ansiedad de la que me correspondía antes del regreso a clases en las semanas previas al comienzo de la escuela. Recién salido del Programa de Diploma en Educación de un año de la Facultad de Educación de McGill, tenía un enfoque en estudios sociales e inglés. En las últimas semanas del verano, unas dos semanas antes del comienzo del año escolar 75-76, todavía no tenía una oferta de trabajo. Luego, por casualidad, tuve una entrevista a fines del verano con el subdirector de la escuela secundaria John Rennie en la isla oeste de Montreal. Aún más fortuitamente, ese subdirector resultó ser mi ex profesor de historia en otra escuela secundaria de West Island donde me gradué en 1968. Afortunadamente, él me recordaba como un buen estudiante (para ser honesto, yo no era bueno académicamente, solo promedio .) Me ofreció un trabajo después de unos cinco minutos de charla informal sobre los buenos tiempos. Luego me dijo que el trabajo consistía en enseñar matemáticas y ciencias generales en los grados 7 y 8. "No te preocupes", me dijo después de que admití con total revelación que mi "especialización" era en inglés y estudios sociales. "Todo lo que tienes que hacer es adelantarte un par de días a los estudiantes". Durante los pocos días que quedaban antes de la escuela, mi ansiedad se hizo cada vez más pesada. La noche antes de mi debut como docente, apenas dormí.

Regresando a la escuela con el virus corona

Recuerdo esos días para trazar una especie de paralelo entre ese momento y las últimas semanas para padres, maestros y estudiantes después de que el gobierno de Quebec anunció en junio que, a pesar de la pandemia de coronavirus, las escuelas primarias y secundarias de la provincia estarían abiertas. para negocios. A medida que se acercaba ese momento, solo puedo imaginar el grado de angustia anticipatoria presente entre los afectados por la decisión del gobierno. Entonces, decidí intentar tomar el pulso a algunos padres y maestros de mi comunidad. Hablé con dos maestros de secundaria y tres padres, todos los cuales conozco, algunos casualmente, otros como vecinos, y un padre recientemente designado como comisionado de la Junta Escolar Lester B. Pearson (LBPSB), que administra una gran área geográfica. desde Verdun hasta Vaudreuil, fuera de la isla, con unos 20,000 estudiantes. Hablé con ellos antes de que comenzaran las clases (para la mayoría, regresaron a clases el 4 de septiembre) y después de los primeros días, después de casi seis meses en casa. Hubo alivio, nervios tensos, preguntas sin respuesta, rumores, legiones de correos electrónicos, consultas, agravios, lágrimas y mucha paciencia.

Entrevisté a mis vecinos Nadia Lawand y mi esposo Jason Bolanis, padres de cuatro niños de 2 a 9 años, dos de cada género. Tres de sus hijos regresaron a la escuela la semana pasada. El otro padre, Allison Saunders, tiene dos hijos en la escuela secundaria; Julian durante su primer año, y Ben de 15 años que se dirige al grado 10.

Los dos maestros con los que hablé tienen experiencia y están involucrados en sus escuelas. En Westwood Senior High School en Hudson, Catherine Hogan, quien este año comienza su vigésimo año con el LBPSB, enseña inglés en el grado 20 y dirige el programa de vida estudiantil. Michael Wadden está en su undécimo año de enseñanza y es una especie de especialista en historia, con la tarea de guiar a los estudiantes de Macdonald High School en Ste-Anne-de-Bellevue a través del importantísimo curso de décimo grado de Quebec y de historia canadiense.

Aquí están sus historias ... hasta ahora:

Nadia Lawand y Jason Bolanis

Es una casa llena en el modesto bungalow de 3 dormitorios en los suburbios de Pointe-Claire, donde Jason Bolanis y Nadia Lawwand han estado secuestrados en su mayoría desde mediados de marzo pasado, cuando las escuelas de Canadá se paralizaron. El hogar normalmente ocupado con una agenda extracurricular completa se reunió repentinamente no en la camioneta familiar para dejarlos en diversas actividades, sino en los límites limitados de su hogar. “Digamos que tuvimos nuestra parte de crisis”, me dijo Nadia cuando le pregunté cómo habían sido los últimos cuatro meses en casa. Su hija mayor, Bella, al menos recientemente ha podido reanudar sus lecciones de patinaje, pero para las más pequeñas ha sido un largo camino a pesar de las oportunidades de aprendizaje en línea que la junta escolar brindó durante una parte de la primavera. “Debatimos la idea de la educación en el hogar, pero con cuatro hijos sería difícil. Ha sido difícil desde marzo pasado ”, admitió. "Son jóvenes y saludables y necesitan volver a la escuela". Esa decisión viene con algunos daños colaterales. La madre de Nadia está inmunodeprimida y la burbuja familiar cuidadosamente construida de los últimos meses está en suspenso durante al menos las primeras semanas de escuela. 

Los niños dotados demuestran un intenso enfoque en temas de interés.

Fue un asunto de familia para la familia Bolanis-Lawand quienes, a excepción de la más joven Tessa, regresaron a St. John Fisher Junior School la semana pasada. De izquierda a derecha está Bella, Sonny, Tess y Beau.

A medida que se acercaba el día del primer día de cuarto grado de su hija de 9 años en la escuela St. John Fisher Junior School, su madre supo que las cosas estaban volviendo a la normalidad cuando Bella le pidió algunos consejos de vestuario para el regreso a la escuela. Teniendo en cuenta las regulaciones del gobierno de Quebec, Nadia se aseguró de que las máscaras que iban a usar sus hijos se usaran como una especie de collar de máscara (indicativo del desgaste infligido por los niños a la ropa y los accesorios, un collar de máscara necesitaba reparaciones después del primero día atrás.) 

 

Con tres niños en la misma escuela y con Tessa de 2 años a cuestas, la familia Bolanis-Lawand salió con toda su fuerza el jueves pasado, el primer regreso de día completo. “La escuela estaba súper organizada”, dijo Jason. “Todos los maestros, ayudantes y la administración de la oficina principal estaban al frente para guiar a los niños. Normalmente, los padres pueden acompañar a sus hijos dentro de la propiedad escolar o incluso dentro de la escuela”, explicó. "Pero este año, todos los padres estaban afuera mirando hacia adentro". Los maestros de St. John Fisher habían tomado medidas extraordinarias para asegurarse de que sus estudiantes los reconocieran enviando a cada hogar dos fotos de ellos, uno al lado del otro, uno con máscara y otro sin ella. Ambos padres hicieron que sus hijos informaran sobre las expectativas de la escuela en lo que respecta a los protocolos COVID-19, incluso practicando el uso de máscaras en las semanas previas al comienzo de la escuela. Son Beau tuvo algunos problemas para respirar con su máscara puesta, pero como estudiante de primer año de jardín de infantes, una máscara no es una prioridad de salud. “Él sabe cuándo usarlo”, dijo su mamá. "Todos lo hacen. Algunos niños usaban sus máscaras, pero ninguno de mis hijos está realmente obligado a tener máscaras según las pautas del gobierno (Quebec establece que los estudiantes de quinto grado en adelante deben usar máscaras en "áreas comunes"). El mayor "revés" de la El día sucedió en una de las clases de sus hijos cuando un estudiante tosió, pero no en su codo, como es el procedimiento recomendado.

 

Jason, un camarógrafo emprendedor, ha vuelto a la acción durante aproximadamente dos meses tratando de construir y restablecer su clientela. “(El negocio) ha tenido sus picos y valles”, explicó. “Pero hay personas que ya no van a la oficina y quieren aumentar su presencia en línea. Sin embargo, todavía existe cierta incertidumbre sobre la inversión en nuevos proyectos ". Para Nadia, es solo en casa ... casi. El jueves pasado fue su primer día sin niños dando vueltas por el aburrimiento. Con la joven Tessa ocasionalmente en la guardería, finalmente tuvo tiempo de revisar todos esos correos electrónicos sin respuesta y algunas facturas que habían escapado al escrutinio. El silencio fue casi ensordecedor.

 

Allison Saunders y Dante Cicchetti

Como estratega de contenido digital en la Universidad de Concordia, Allison Saunders conoce su camino en el mundo de la educación. Y como hija de una ex maestra y administradora de la LBPSB, está familiarizada con las maquinaciones de la burocracia educativa. De modo que su frustración al tratar con dos juntas escolares es comprensible. Esa frustración culminó en la larga espera para arreglar el horario de su hijo Ben de 15 años en la escuela secundaria St. Thomas en Pointe-Claire. Fue solo el día antes de su regreso a la escuela que se finalizó su agrupación para su clase de grado 10. La Royal West Academy, dirigida por el English Montreal School Board, fue más eficiente: su hijo menor, Julian, conocía su horario mucho antes de que comenzara su primer año de escuela secundaria. “Estaba recibiendo correos electrónicos de St. Thomas que decían que recibiríamos otro correo electrónico. Luego ellos (St. Thomas) cambiaron de Fusion a Mosaic, un nuevo sistema que contiene información y programación de los estudiantes. Fue muy frustrante ”, explicó. 

Los niños dotados demuestran un intenso enfoque en temas de interés.
Ben Cicchetti, de 15 años, estaba listo para su primer día de regreso en la escuela secundaria St. Thomas en Pointe-Claire la semana pasada. A pesar de algunos problemas de programación inicial, el estudiante de décimo grado tuvo un buen día de regreso después de casi seis meses.
 

Los niños dotados demuestran un intenso enfoque en temas de interés.
Julian Cicchetti comenzó su primer año de secundaria en la Royal West Academy la semana pasada.
 

Su ansiedad es comprensible, exacerbada por las recientes manifestaciones en Estados Unidos con los ojos enfocados en el movimiento Black Lives Matter. Allison fue nombrada recientemente para el Consejo de Comisionados (CoC) de la LBPSB, una de las dos nuevas incorporaciones al CoC de la LBPSB que se realizaron a raíz de un perturbador video viral de cara negra por dos estudiantes de John Rennie. Como uno de los dos comisionados negros (el otro recientemente designado es el empresario y personalidad de los medios Malek Shaheed), también es parte del grupo de trabajo de la junta escolar sobre equidad e inclusión encabezado por la profesora asistente de la Universidad McGill, la Dra. Myrna Lashley, que creó la junta. en julio para abordar el racismo y la discriminación dentro de la LBPSB. Para Allison y su esposo Dante Cicchetti, el regreso a la escuela es más que una cuestión de horarios y protocolos COVID-19. “Es importante que les mostremos a nuestros hijos el poder que tienen para ser parte del cambio, pero también la responsabilidad que conlleva”, explicó. "Pero mostramos haciendo". Las noticias en los EE. UU. Han estado llenas de imágenes desagradables e injusticia, por lo que ella, su esposo y sus dos hijos se han centrado en la justicia social, así como en el contrato de regreso a la escuela entre la escuela, el estudiante y el gobierno.

En la zona cero, su familia está preocupada por su burbuja familiar, ya que tienen en cuenta a su padre, que está cerca de los 70 años. “” Somos conscientes de eso ”, dijo Allison. “Ahora que los chicos han vuelto a la escuela, tenemos que tener aún más cuidado con nuestra burbuja familiar. Lo mantenemos pequeño y manejable ". Ese mismo enfoque también podría aplicarse al horario de su hijo Ben en St. Thomas, que, como en el grado 11, es un día en la escuela, seguido de un día de aprendizaje en línea. En Royal West, todos los estudiantes de séptimo grado tienen su propia área y no hay necesidad de viajar a otras aulas para opciones como música o arte; la opción los profesores vienen a los alumnos. En St. Thomas Secondary III-V (grados 7-9) se les permite salir del campus a la hora del almuerzo, para disgusto de los clientes de la cercana clínica de salud StatCare y de la plaza comercial, que tuvieron más de cinco meses de relativa paz y tranquilidad con no hay estudiantes en fila en el popular depanneur de la plaza, donde para algunos adolescentes el almuerzo es una bolsa de papas fritas y una Coca-Cola.

Ben y Julian tienen algunas máscaras de colores funky para usar, algunas en mezclilla y camuflaje para combinar con las que Ben ordenó a un empresario de máscaras en línea que sabe que a los adolescentes les gusta hacer una declaración con sus gustos de máscaras como accesorios. Trabajando desde casa solo con ella y su esposo, Allsion se alegra de que sus hijos hayan vuelto a aprender. "Es un ambiente diferente ahora", dijo. “Menos interrupciones y ahora los niños tienen diferentes historias que contar. Las cosas se estaban poniendo un poco rancias durante los meses de encierro ".

Catherine Hogan-maestra- Westwood Senior High School-Hudson

Fue un largo primer día en la escuela para las dos hijas de Catherine Hogan la semana pasada y para su madre. La hija mayor, Grace, no durmió mucho la noche antes de comenzar su primer día en la escuela secundaria, ya que la ansiedad anticipada la había alcanzado unos días antes. Su madre necesitó algo de tranquilidad concentrada antes de que se acomodara para pasar la noche. La más joven, Tess, ya salía a las 7 am con su viaje compartido a la Escuela Vanguard en St. Laurent, también una novedad para ella. Mientras tanto, Catherine estaba buscando un primer día muy completo en Westwood bajo sus protocolos COVID-19. Los estudiantes de undécimo grado que ella enseña inglés también deben haber compartido algo de la misma ansiedad, aunque de adolescentes probablemente no estaban dispuestos a admitirlo. Sin las asambleas habituales del primer día, los estudiantes de los grados 11-9 se dirigieron hacia su área de la escuela. No habría mezcla de grados, al menos no en la escuela. Se bloqueó el acceso a los tres pisos para evitar cualquier mezcla de grados. En el recreo y el almuerzo, las líneas de mezcla socialmente distanciadas pronto se desdibujaron. “Hubo muy poco distanciamiento social”, compartió Catherine más tarde. "Te olvidaste de que existe covid". Hay zonas afuera para los grados, pero mantener eso fue un desafío imposible para los maestros ya que los estudiantes encontraron a sus amigos de otras burbujas de clase, algunos se dirigieron a Village of Hudson para aumentar el factor calórico del almuerzo que sus padres habían proporcionado. Los compañeros profesores de Catherine, en broma, estaban especulando cuánto tiempo podría tomar para que ocurriera algún tipo de brote de covid dada la cantidad de contacto cercano que tenían los estudiantes. ¡Y fueron solo los primeros días del año escolar!

Tess (izquierda) y Grace se fueron a la escuela la semana pasada.

La maestra / madre Catherine Hogan capturó este breve momento antes de que sus hijas Tess (izquierda) y Grace se fueran a la escuela la semana pasada.

Catherine, en sus casi 20 años de enseñanza, ha estado involucrada en la vida estudiantil y en el entrenamiento. Su carga docente incluye una clase de liderazgo estudiantil, a menudo la base para el consejo estudiantil y la organización de actividades sociales. Por ahora no habrá deportes extracurriculares de otoño. "Nuestro ministro de educación, Roberge, está siendo bastante optimista", dijo Catherine sobre el reciente anuncio del ministro de que las actividades extracurriculares se reanudarían a mediados de septiembre. En otros años, fue entrenadora de fútbol femenino, pero a partir de ahora, la GMAA, que gobierna y organiza los deportes escolares, no ha ofrecido horarios para los deportes de otoño.

Durante los primeros días de clase, a veces usaba una máscara, otras veces en aulas más grandes luchaba por ser escuchada, su voz amortiguada por su máscara. Entonces, al igual que sus estudiantes, la máscara se convirtió en una herramienta situacional. Sus clases de grado 10 y 11 están divididas en grupos, por lo que el tamaño de las clases es inusualmente ideal de 15 por clase. “Le recalqué a mis clases de 11º grado la necesidad de estar organizadas este año, que no habrá el mismo aprendizaje guiado por el maestro todos los días”, dijo Catherine, a quien a veces se llama como experta educativa en la estación de radio de Montreal AM CJAD. “Puedes hablar con los estudiantes mayores de esa manera. Lo consiguen. Saben lo fundamental que es este año para ellos ".

Al final de ese primer día, ella era una madre feliz, ya que Grace y Tess informaron que habían tenido un buen día. “Necesitaban volver a la escuela”, me dijo Catherine. "Todos estamos felices de estar de regreso y no estar en línea todos los días".

 

Michael Wadden-profesor-Macdonald High School-Ste-Anne-de-Bellevue 

El regreso a clases para Mike Wadden fue un juego de pelota diferente en comparación con las otras 52 escuelas primarias y secundarias de la LBPSB. La construcción de la preparatoria Macdonald, de 100 años de antigüedad, fue detenida por covid este verano y ha llegado al comienzo del nuevo año escolar. El edificio en el campus de John Abbott College y los estudios ambientales y agrícolas de la Universidad McGill necesitan algunas mejoras, incluida la eliminación de algunos asbesto. Por lo tanto, durante al menos las dos primeras semanas, los maestros y los estudiantes están en línea siguiendo sus horarios diarios. "Todos estamos en Zoom durante todo el día escolar", informó Wadden. “Es mucho mejor que la primavera pasada, cuando el sistema se montó de forma un tanto desordenada. Estoy gratamente sorprendido de lo bien que han ido las cosas ". Esta vez no ha habido ningún bombardeo de Zoom o comportamiento inapropiado que afectó a algunas escuelas la primavera pasada cuando se apresuraron a poner en marcha su instrucción en línea. 

 

Michael, sin embargo, tenía algunas reservas sobre cómo se desarrollaría el año escolar. Como uno de los representantes escolares de Pearson Teachers Union, ha seguido de cerca el plan del gobierno para un eventual regreso a clases. “Me parecía que en junio y julio, el gobierno no estaba en la misma página que la junta escolar y los maestros”, recordó. “¿Las clases iban a ser la burbuja o no? ¿Se moverían los estudiantes de una clase a otra? ¿Está a 2 metros de distancia o 1.5 metros para estudiantes y profesores? Estas preguntas y más le preocupaban a medida que se acercaba la fecha de regreso a clases. Pero una cosa sabía con certeza: como futuro padre (su esposa está esperando su primer hijo a fines de septiembre), usaría una máscara.

Por ahora, se siente cómodo sentado frente a su computadora, con una variedad de herramientas de Google al alcance de la mano. Y para cuando los estudiantes regresen a “Mac”, los maestros, estudiantes y administración de la escuela se beneficiarán de la experiencia acumulada de otras escuelas que han arreglado algunas de las arrugas de los primeros días. Para cuando “Mac” se abra para los estudiantes, Michael bien puede ser un nuevo padre con un nuevo conjunto de ajustes de vida que enfrentar. Menos horas de sueño será una de ellas. 

Escuela secundaria John Rennie

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